El impuesto sobre la factura de la luz y el gas será modificado y ajustado según indicó la ministra de Hacienda Maria Jesús Montero el pasado jueves para adaptarla a los criterios tributarios de la Unión Europea.
Del mismo modo se está trabajando para que los denominados “beneficios caídos del cielo” de las compañías energéticas sean controlados y limitados gracias a la Comisión Europea.
Pedro Sánchez ha aprobado dos tributos nuevos que afectan tanto a las entidades bancarias como a las compañías eléctricas de gas y petróleo que se ven beneficiadas por la subida de los tipos de interés.
La ministra de Hacienda ha afirmado que el propulsor de los cambios llevados a cabo ha sido el propio gobierno español, seguido de Europa que ha acogido las medidas planteadas, por lo que no existe conflicto entre España y Europa con el fin de proceder a una adaptación entre los criterios españoles y europeos.
La diferencia entre el criterio de España y Europa radicaba en la imposición de un impuesto adicional sobre los beneficios netos, criterio que en España se había entendido como una doble imposición del impuesto sobre las energéticas, mientras que la propuesta española había consistía en una prestación no tributaria de interés público aplicándose sobre los ingresos brutos.
Núñez Feijóo refrenda la nueva medida siempre y cuando se coordine con los criterios europeos tras haberse posicionado inicialmente en contra.